Los pimientos asados es una de mis guarniciones preferidas por que son tiernos, con un toque ahumado y deliciosos.
Añaden sabor y textura a variedad de platos y salsas. Una vez que sabes lo sencillos que son de prepararlos, nunca volverás a gastar dinero en los pimientos en conserva que nos venden los supermercados.
Cantidad: 4 personas
Utensilios: Horno
Ingredientes: (para 4 personas):
- 4 pimientos de asar
- Aceite de Oliva
- Sal marina sin refinar
Elaboración:
- Precalentar el horno a 200º C.
- Lava los pimientos bajo el grifo y sécalos bien.
- Pon papel de horno en la bandeja del horno y coloca encima los pimientos enteros.
- Échale a cada pimiento un chorrito de aceite de oliva por encima y un poco de sal.
- Baja la temperatura del horno a 180º, mete la bandeja con los pimientos para asarlos y cocina durante 45 minutos.
- Saca la bandeja del horno y espera a que se templen los pimientos para quitarles la piel y las pepitas. Córtalo en tiras. Podemos comerlos servidos con aceite de oliva y sal
Nota:
Para conservarlos, los guardamos en un bote de cristal, añadimos un poco de agua de la cocción y rellenamos con aceite de oliva hasta cubrirlos. Con este método lograremos que se conserven unos 30 días en el frigorífico.
Si los queréis para todo el año, rellenaremos los botes (esterilizados) añadiendo aceite de oliva cubriendo los pimientos. Los pondremos al baño maría, hirviendo durante al menos 20 minutos. De esta manera haremos unas magníficas conservas caseras disponibles para cualquier ocasión.
Otra manera de conservarlos es congelarlos. Bastará con hacer paquetitos con papel film con la cantidad que nos convenga.