1- Consume alimentos altos en carotenos. Estos compuestos de frutas y verduras rojas, naranjas y verdes protegen a la piel de los rayos solares y reparan el daño. Melocotón, tomate, pimiento rojo, espinacas y kale.
2.- El consumo de té matcha rejuvenece y repara el daño producido por los radicales. Anímate a tomar un matcha latte en tu desayuno.
3.- Consume una cucharada de colágeno hidrolizado todos los días. Hay estudios que confirman que su consumo mejora la calidad de la piel.
4.- Consume grasas de calidad. Nuestra piel, cerebro y hormonas necesitan grasas de buena calidad para su correcto funcionamiento.. Consume aceite de oliva virgen extra, olivas, alcaparras, aguacate, frutos secos y semillas.
5.- No te olvides de los minerales que cuidan y reparan nuestra piel. El silicio y el azufre que dan estructura, elasticidad y fuerza a la piel. Los encontramos en los rábanos, el pepino, avena, mijo, berros, kale, cola de caballo, crucíferas, huevos, pavo y legumbres. Y el zinc, que repara el daño que se genera por el medio ambiente. Mariscos, semillas de calabaza, semillas de cañamo y carne de pasto.
6.- Las vitaminas también son indispensables para lucir una bonita piel. Asegura tu consumo de vitaminas del grupo B (pescado, carne y huevos), vitamina C, la vitamina antioxidante por excelencia (cítricos, acerola, suplementación), la vitamina D (sol, yema del huevo, pescado y suplementación), vitamina A (legumbres, lácteos, carotenos: zanahoria, calabaza, etc) y vitamina E (aceite de oliva, frutos secos y semillas).
7. No olvides tu rutina de cuidado personal.
8.- Antes de salir de casa, ponte protector solar. Sea invierno o verano
9.- Toma un zumo verde a diario o por lo menos 5 días por semana. Aporta la mayoría de nutrientes que necesita la piel. Recuerda que en Enero tendremos un reto de zumos. Cuento contigo!
